Cuidadanos-del-Mundo - Para pruebas

!!!Bienvenido amigo visitante!!!
September 13, 2009
En defensa del general Augusto Pinochet
Por Jesus V Diaz

Creo que es mi deber hacer este artículo póstumo en defensa del general Augusto Pinochet, ya que una de las pocas alegrias que tuve mientras viví en la Satrapía Castrista fue cuando me enteré que el incipiente comunismo de Allende habia sido derrocado por el ejercito chileno encabezado por el general Augusto Pinochet, frustrando los planes de Allende y Fidel Castro de convertir a Chile en otra Cuba. .

Me he preguntado muchas veces: ¿Por qué gran parte de nuestros hermanos latinoamericanos se escandalizan por los procedimientos empleados por el Gobierno Militar de Augusto Pinochet contra el terrorismo de los comunistas chilenos?
En todas partes los terroristas con un desprecio total por la vida humana colocan indiscriminadamente sus cargas de muerte, y cuando se les increpa por las victimas inocentes, responden cinicamente, que son daños colaterales necesarios. Por supuesto, entre las victimas inocentes nunca aparece un padre, una madre, un hermano, o un hijo de los terroristas.
En Cuba, los terroristas del 26 de Julio colocaban bombas en lugares públicos, con el propósito de sembrar el terror dentro de la población, sin importarle a quien pudieran dañar, y muchos cubanos que nada tenian que ver con el gobierno de Batista murieron o fueron mutilados por aquel inicuo proceder.
Entonces. ¿Por qué nuestros hermanos latinos se escandalizaban por la dictadura de Pinochet y no se escandalizan por la de Fidel Castro? ¿Por qué mitifican al Che Guevara y no pueden verlo como lo que en realidad era: Un criminal sin entrañas cuya doctrina era el odio y que logró saciar parte de su sed de sangre cuando fusilaba a los cubanos en la prisión de La Cabaña.
¿Por qué no pueden imaginarse como seria Chile actualmente si Salvador Allende y Fidel Castro hubieran logrado su plan de convertir a Chile en otra Cuba?
La respuesta a estas cuestiones es bien sencilla: Porque no son cubanos, y por lo tanto no han tenido la desgracia de vivir bajo el yugo de un estado totalitario. Por eso no pueden concebir que los chilenos serian ahora ciervos de Allende, como actualmente los cubanos son ciervos de Fidel Castro, y los venezolanos van camino a serlo de Chavez.

Desafortunadamente los pueblos, fascinados por la propaganda marxista elijen un presidente socialista, tal vez creyendo ingenuamente que si resulta malo, en el futuro pueden cambiarlo. Luego, cuando ya es tarde, aprenden que no se puede coquetear con el comunismo, pues cuando el comunismo se casa con un país, el matrimonio es para siempre, ya que aniquila todos los procedimientos democráticos por medio de los cuales los ciudadanos pueden cambiar de gobernante.
Después de terminada la luna de miel es cuando los pueblos ingenuos sienten el dogal comunista apretando su cuello y lloran lagrimas de sangre, pero ya no hay retroceso. Entonces es cuando comprenden la buena suerte que tuvo Chile, y le piden a Dios que los bendiga enviandoles un Pinochet a ellos también.

Todos tienen el derecho de cerrar sus ojos y creer ciegamente en las mentiras de la propaganda castro-comunista, pero con esa actitud no consiguen mas que engañarse a si mismos, ya que una cosa es la propaganda y otra son los hechos, y los hechos son irrefutables:
En las elecciones presidenciales del 4 de septiembre de 1964 Eduardo Frei obtuvo el 56,9% de los votos, en tanto que Salvador Allende lograba solamente el 38,93% del total de votos.
En las elecciones presidenciales de 1970 resultó victoriosa la alianza de comunistas, socialistas, sectores del radicalismo y el MAPU en la llamada Unidad Popular, que estaba encabezada por Allende, pero solo obtuvo el 36, 3 % del total de votos.
No hay que ser muy inteligente para darse cuenta que el 63. 7% de los votantes chilenos no queria en el poder a la coalición comunista encabezada por Allende. Y si los otros dos Partidos Politicos democráticos que competian contra Allende hubieran tenido un ápice de sentido común y se hubieran unido llevando un solo candidato a competir, en vez de confundir al pueblo, dividiendo a los votantes (como así hicieron), Salvador allende nunca hubiera ganado la Presidencia.
No obstante el estrecho margen de ventaja que obtuvo Allende en relación a los votos recibidos por los otros dos candidatos (ni siquiera alcanzó el 45% del total de votos), no era suficiente para declararlo ganador absoluto, y por consiguiente, su elección tenia que ser ratificada por el congreso, donde encontró a una fuerte oposición.
Por fin, el 24 de octubre de 1970, el Partido Demócrata Cristiano comentiendo un gravísimo error le dió su apoyo a la Unidad Popular y Salvador Allende fue proclamado presidente.

En diciembre de 1972, Allende, acompañado por el general Augusto Pinochet, visitó Cuba donde fue recibido con grandes honores por Fidel Castro, su entrañable amigo, que un año antes había realizado una extensa visita de 23 días a Chile. En esa ocasión Fidel recorrió gran parte de Chile y regocijado con la nueva presa adquirida para el comunismo internacional le obsequió a Allende un fusil AK para simbolizar la defensa de la nueva adquisición.
En la visita a Cuba, Pinochet palpa de cerca la triste realidad del pueblo cubano, sometido a la voluntad de Fidel Castro y se percata de como el estado totalitario ejerce el control absoluto de toda la vida ciudadana, Donde la educación está por completo en manos del gobierno que la utiliza para modelar las mentes de las nuevas generaciones sembrandoles la sumisión incondicional a la Revolución y a Fidel Castro. Donde lo que ha de comer y la ropa que ha de ponerse el “ciudadano” es regida por una libreta de racionamiento impuesta de por vida por el gobierno, la cual cada dia que pasa aprieta mas el cinturón de los cubanos.
Observa también, la miseria del pueblo cubano que contrasta con la riqueza de la élite gobernante.
Entonces, comprende todo el horror que le espera a Chile si Allende y Fidel Castro logran la consecución de sus planes. Y se dice a si mismo que el nunca permitirá que esto ocurra en Chile, su Patria querida.

Al regreso Pinochet se encuentra con un Chile convulsionado. El pueblo chileno rechaza el comunismo. Las mujeres se lanzan a la calle cazuellas en la mano protestando por la escasez de alimentos.
Los acontecimientos políticos se precipitan rápidamente, el más grave de todos fue el asesinato por parte de un comando de ultraderecha del Comandante en Jefe del Ejército, general René Schneider, que era un decidido partidario de Allende.
Junto con todo esto, el discurso político de los partidos de izquierda va adquiriendo tintes cada vez más radicales, en tanto que el enfrentamiento abierto con los grupos opositores se hace realidad en las calles, indicando una situación de lucha de clases a sus ojos desastroza para el País.
Las acciones de grupos como el MIR y sectores del Partido Socialista tendientes a la creación y el fortalecimiento de instancias de "Poder Popular" fuera de los marcos de la institucionalidad para lograr la "Vía chilena al socialismo", tuvo desde su inicio el apoyo de todo el Bloque Soviético, Cuba y los Países No Alineados, lo que se traduciría en el envío de ayuda material y asesores militares, igual a como sucedió en Cuba al inicio de la tirania Castrista.
Pero el pueblo Chileno estaba atento y no se iba a dejar engañar por los comunistas sin dar la pelea. Entonces se recrudecieron las movilizaciones y las acciones en contra del gobierno de Allende, la más importante de las cuales fue la paralización del yacimiento de cobre de El Teniente, junto a la huelga de los gremios de transportistas, que prácticamente inmovilizó el traslado de bienes de un punto a otro del país.
A ello se sumaron los conflictos en la universidad y en los colegios profesionales (médicos y profesores fundamentalmente), que mostraban una división profunda en todos los ámbitos de la vida nacional.
Ante tal situación, Allendede intentando granjearse al ejercito decidió el ingreso de importantes figuras militares al gabinete presidencial, representadas por el Comandante en Jefe, general Carlos Prats, y la oferta de realizar un plebiscito para consultar a la ciudadanía en torno a la continuidad del régimen o la convocatoria a nuevas elecciones.

Estas medidas le parecieron equivocadas y peligrosas al ala mas radical de los comunistas chilenos, los cuales sabian que la realización de un plebiscito seria el fin del mandato de Allende y de sus planes para instaurar en Chile el sistema comunista, por lo tanto le propusieron al Mandatario el cierre del Congreso y la utilización de Facultades Extraordinarias para gobernar.
El pueblo y los Partidos Políticos consideraron aquella situación insoluble, ya que Allende no queria renunciar (estando en una situación donde cualquier otro presidente democrático ya hubiera renunciado para evitar una guerra civil), por lo que decidieron, de forma más o menos abierta, recurrir al recurso del golpe de estado militar para no perder la democrácia.
En junio de 1973 hubo un primer intento de golpe, conocido como "El Tancazo": un regimiento de blindados de la capital se alzó contra el gobierno, pero las fuerzas leales, al general Prats, lograron dominar la situación.
Meses después el general Carlos Prats fue obligado por sus compañeros de armas a renunciar a sus cargos de ministro de Defensa y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas; y fue sustituido por el general Augusto Pinochet,
Finalmente, el 11 de septiembre de 1973, el general Pinochet encabezó un golpe militar contra Allende el cual se refugio en el palacio de la Moneda, sede del gobierno. El presidente Allende rechazó las exigencias de rendición y prefirió morir, porque sabia que sus compinches Fidel Castro y el Che Guevara nunca le perdonaria el fracaso.

Durante su Gobierno Pinochet desencadenó una dura represión con el objetivo de eliminar a la oposición comunista y concentró en su persona casi la totalidad de los poderes del Estado. En 1980 aprobó una nueva Constitución de carácter autoritario, que aseguró su permanencia en el gobierno hasta 1989. Sin embargo, nunca intentó tomar el control económico del País (muy diferente a lo que hizo Fidel Castro en Cuba, y con lo cual logró convertir a la Isla en uno de los paises mas pobres de America).

Su régimen instituyó una nueva política económica basada en los principios neoliberales y la privatización de las empresas públicas. Años despues, la libertad económica adoptada por su régimen comenzó a dar rendimientos y a experimentar una gran expansión, hasta el punto de que fue tenida como modélo en América Latina.
Eliminado ya el peligro comunista convocó expontaneamente en 1988 un referéndum para saber si el pueblo queria que el continuara al frente del Gobierno. Las urnas no le fueron favorables, y comprendiendo que su deber para con su Patria habia terminado inició el proceso de transición a la democracia demostrando al mundo que el nunca fué un ambicioso del Poder como lo es Fidel Castro.
Las elecciones convocadas a continuación para sucederle fueron ganadas por el democristiano Patricio Aylwin, y en 1990 le cedió la presidencia. No obstante, conservó la jefatura de las Fuerzas Armadas hasta marzo de 1998, cuando entró en el Congreso como senador vitalicio.

En sus últimos años, viajó a Gran Bretaña para una intervención quirúrgica, y debió hacer frente a una orden de detención que lo retuvo en Londres durante varios meses. Intervino en el proceso el miserable juez español Baltasar Garzón, que nunca tuvo la decencia de dictar orden de arresto contra el criminal Fidel Castro. Actualmente este jues esta siendo juzgado en España por prevaricación.

Pinochet dejó una carta póstuma dedicada al pueblo chileno. Abajo les copio el contenido de ella.

"Mensaje a mis compatriotas, para ser difundido a mi fallecimiento. Chilenos, sin excepción: Muchas veces hice llegar mi pensamiento a ustedes durante mi vida pública. Especial recuerdo hago de mis comunicaciones desde mi cautiverio en Londres.
Ahora, con esfuerzo, he hilvanado los siguientes pensamientos que surgen desde lo profundo de mis sentimientos y convicciones. Quiero despedirme de ustedes con mucho cariño. Entiendo que esto parecerá incomprensible para muchísimos, pero es así.
En mi corazón no he dejado lugar para el odio. He recorrido muchos años y entiendo del amor y del dolor. Yo elegí la carrera militar por amor a la Patria. El que he mantenido sin alteración desde el primer día que entré a la escuela Militar y, ahora, al irme de este mundo, aquel sentimiento llena mi espíritu enteramente.

Amo a la Patria; amo a todos ustedes. Por amor se pueden hacer muchas cosas buenas y muchas malas. Acertadas y erróneas. Yo nunca imaginé entrar a la Gran Historia de mi país, pero así ocurrió. En transcurrir público de éste se fue transformando desde decir "en Chile nunca pasa nada", a un precipitado de dramáticos acontecimientos.
No quiero entrar en análisis mayores, propio de historiadores pero sí hacerlo respecto a afirmaciones profesionales y humanas que son las que me interesa comunicarles a ustedes.
Década conflictiva Yo, como militar, percibí la gravísima y compleja situación que se avecinaba mientras avanzaba la década de los setenta. Nadie podrá discutir que el mundo entraba en un enfrentamiento global, ideológico y miltiar, al que se llamó la "guerra fría". Cada día los conflictos se agrandaban más, se calentaba más esa "guerra" y eran más complejos, en especial, para una mirada observadora militar.
Los ángulos comprometidos en esa guerra crecían día a día y abarcaban la casi totalidad de los planos de la vida, pública y privada de la gente. Crecía y presionaba al hombre común ese sino tan trágico de una guerra, o tú o yo, con el agravante que el dilema se extendía a la comunidad toda internacional, algo así como una guerra total y sin cuartel.

Un militar no podría restarse a este panorama, porque era muy sombrío, debía prepararse para lo mejor y para lo peor, ecuación clave en una estrategia profesional. Chile empezó a arder y se encajonaba, sin escape objetivamente, en mi concepto, a tres posibilidades (esto que lo entiendan las personas jóvenes, nacidas con posterioridad a la crisis).
A una guerra civil, sin cuatel, "de ventana a ventana", con miles y miles de personas muertas.
A una imposición de una dictadura llamada del proletariado, ideológica, marxista leninista, con la pérdida total de la libertad política y del Estado de Derecho;
Y, a una reacción conjunta de civiles y militares para elimnar tajantemente las anteriores.

Nadie discute que la inmensa mayoría de la población se inclinaba por ésta última alternativa. Chilenos, amigos sin exclusión. Una guerra internacional, o una civil, es algo atroz. Lo peor que le puede ocurrir a una sociedad.
La guerra, por esto, hay que evitarla hasta donde sea posible. Los adultos que vivieron el tiempo del pronunciamiento militar se dieron cuenta cabal que la única opción realista era esto último.
Máximo rigor Hubo que actuar para cubrir eficazmente todos los ángulos de un enfrentamiento amplio, porque explícitamente los partidos de Gobierno sostenían que la vía armada era la única forma de alcanzar el poder, a la corta o a la larga. Creo que nunca de manera tan contundente se había amenazado una guerra civil en nuestro país o en otra parte del mundo. Si a lo anterior se agregan el sinnúmero de ratificaciones de hecho y retóricas que confirmaban tales propósitos, hicieron más explicable la intervención militar.
Había, pues, que actuar con el máximo rigor y sostenidamente hasta conjurar cualquier extensión del conflicto que se anunciaba.
Si no se procedía, así, la acción militar habría terminado en un fiasco, y eso hubiera provocado en el pueblo por muchos años consecuencias negativas en extremo dolorosas.
El 73, por las citadas caracteristicas del contrincante, fue preciso emplear diversos procedimientos de control militar, como reclusión transitoria, exilios autorizados, fusilamientos con juicio militar. En muchas muertes habidas y en los desaparecimientos de cuerpos es muy posible que no se logre jamás un conocimiento acabado del cómo o por qué ocurrieron. No se puede descargar con simpleza la responsabilidad de un sinnúmero de extralimitaciones porque no hubo un plan institucional para ello.
Los conflictos graves son así y siempre serán así: Fuente de abusos y exageraciones. ¿Pero cómo tantos no han querido o podido entender la extrema gravedad de la amenaza si todo el contexto nacional e internacional avalaba su existencia?
En los enfrentamientos habidos en la Historia el resultado en cuanto a pérdidas de vidas y las deshumanizaciones son parte de su definición. Lo anterior no va en búsqueda de atenuantes a los excesos, sino a recordar su presencia insoslayable. Yo, como Presidente de la República y comandante en jefe del Ejército actué como les dije, con rigor, pero con mucha más flexibilidad que la que se me reconoce, por lo que yo siempre me refería a una "dictablanda".
Mientras el fanatismo ideológico y armado constituyera un peligro para la estabilidad, no era posible bajar las manos. Chilenos todos: ¡Cómo quisiera que no hubiese sido necesaria la acción del 11 de septiembre de 1973! ¡Cómo hubiera querido que la ideología marxista leninista no se hubiera interpuesto en la nuestra vida patria! ¡Cómo hubiese deseado que el Presidente Salvador Allende no hubiere incubado en su ideario el propósito de transformar a nuestra Patria en una pieza más del tablero dictarorial marxista!
Las guerra traen dolores muy difíciles de sanar. Los parientes y amigos de compatriotas nuestros caídos en el enfrentamiento fraticida tendrán para siempre un recuerdo negro de lo ocurrido. Yo voy a misa y comulgo. Nunca dejo de pensar en las heridas abiertas.

Cómo me gustaría andar en las calles, saludando, consolando, ayudando... Mi destino es un tipo de destierro y soledad que jamás hubiera pensado, y menos deseado. Para terminar, con toda sinceridad declaro estar orgulloso de la enorme acción que hubo que realizar para impedir que el marxismo leninismo alcanzara el poder total, y también, para que mi entrañable Patria fuera una "gran nación", como fue el lema que desde el principio inspiró a la Junta de Gobierno.
De eso, nunca dudaré, sin una pizca de vacilación. De repetirse la experiencia hubiere deseado, sin embargo, mayor sabiduría. Augusto Pinochet Ugarte Capitán general, Ex Presidente de la República, ex senador de la República, ex Comandante en Jefe del Ejército."

Si pensamos a priori que todos los dictadores son iguales nos equivocamos, solo a posteriori es posible comprender la diferencia entre unos y otros, y el tiempo es el mejor maestro para juzgar. Entonces es interesante contrastar la dictablanda de Pinochet con la Satrapia Castrista:

REPRESION INTERNA:
PINOCHET: Acusado de la desaparición y muerte de no menos de 3 mil ciudadanos chilenos y extranjeros, por razones políticas, dentro de Chile.
CASTRO: Acusado de ser el responsable de no menos de 18 mil muertes por razones políticas, dentro de Cuba, entre las que se incluyen ejecuciones de ciudadanos extranjeros.

TIPOS DE REPRESION INTERNA: PINOCHET: Ejecuciones extrajudiciales y despariciones de ciudadanos arrestados por las fuerzas de seguridad. Torturas físicas y mentales a opositores e inclusive a personas neutrales en el conflicto interno chileno. CASTRO: Ejecuciones extrajudiciales. Ejecuciones judiciales como resultado de juicios "preparados" en los que los acusados fueron declarados culpables de antemano. Torturas físicas y mentales. Largas condenas a prisión de opositores. Tres de ellos cumplieron las más largas sentencias en todo el mundo: Mario Chanes (30 años); Ernesto Díaz Rodríguez (29 años y medio); Eusebio Peñalver (28 años). Los tres formaron parte de las fuerzas revolucionarias que combatieron a Fulgencio Batista.

TIEMPO EN EL PODER Y RESPONSABILIDADES:

PINOCHET: 17 años (1973 a 1990). Jefe de estado y de gobierno. Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Chile. (Nota: como es tradicional en las dictaduras militares, las fuerzas armadas tuvieron en ese lapso una autoridad superior a la del gobierno).

CASTRO: 50 años (1959 - .... el 1 de enero de 2009 cumplirá 50 años en el poder). Jefe de estado y de gobierno. Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Cuba. Primer secretario del Partido Comunista de Cuba. (Nota: A diferencia de los partidos políticos tradicionales en América Latina y el resto del mundo, el Partido Comunista de Cuba es el órgano rector de la sociedad cubana, y su autoridad está por encima de la del gobierno).

IMPACTO INTERNACIONAL:

PINOCHET: Acusado de haber jugado un rol determinante en la llamada Operación Cóndor, dirigida a reprimir los movimientos de izquierda en el cono sur americano, en coordinación con otras dictaduras militares de la región, con saldo de un gran número de muertos y desaparecidos fuera de Chile. Acusado de haber ordenado asesinatos políticos fuera del territorio chileno, como el de Orlando Letelier, ex funcionario del derrocado gobierno de Salvador Allende. Pinochet fue acusado también de haber dado refugio en Chile a "terroristas" y "torturadores" procedentes de otras naciones del mundo.
CASTRO: Ha admitido personalmente haber fomentado movimientos guerrilleros de orientación marxista-leninista en "todos los países de América Latina, excepto México". Por esta razón, ha sido acusado de violar la soberanía de todos esos países durante las décadas de los 60, 70 y 80, con saldo de un gran número de muertos. Acusado de haber fomentado guerras de exterminio en apoyo a regímenes marxistas de Africa (Angola y Etiopía). Acusado de darle refugio en Cuba a "delincuentes internacionales" y "terroristas" y de haber entrenado en la isla a numerosos comandos extranjeros.

ARRIBO AL PODER:
PINOCHET: Golpe de estado al gobierno constitucional del presidente Salvador Allende.
CASTRO: Revolución popular contra el dictador Fulgencio Batista.

SALIDA DEL PODER:
PINOCHET: Mediante un referendo popular sobre el destino de Chile propiciado por él mismo, en el que la mayoría de los chilenos votó a favor de instaurar en el país un régimen democrático. Al entregar el poder, Pinochet se reservó los cargos de jefe de las Fuerzas Armadas de Chile y senador vitalicio.
CASTRO: Permanece en el poder. Ha dicho claramente que no se producirán cambios políticos en Cuba "al menos en nuestra generación".

EADES Y FORMACION PROFESIONAL:
PINOCHET: 83 años, militar de carrera.
CASTRO: 72 años, abogado.

OTROS DETALLES: Ambos han sido acusados por sus adversarios políticos de haber reprimido la libertad de expresión, de prensa y de asociación durante sus respectivos mandatos.

En cuanto al manejo de la sociedad,
Pinochet ha sido acusado de manipular a la empresa privada y favorecer a empresarios que simpatizaban con su gobierno.

Castro ha sido acusado de haber creado una sociedad totalitaria en la que el Estado es propietario de todos los medios de producción y servicios (incluidos los medios de comunicación social), por lo que toda la fuerza laboral cubana tiene un solo empleador, el estado. En esta década, Castro ha abierto Cuba al capital extranjero discretamente, pero no permite que los nacionales cubanos sean propietarios de empresas, sólo trabajadores por cuenta propia en un limitado número de servicios.